Mito es de pocas palabras, y va diciendo tanto. es, entre miles que son, y entre otras y otros que no son. buscaría en los kioscos capitán del espacio, si supiera lo que es. putearía al viento alejándose, si agustín va con esa unidad impresentable. yo, también. Le busca la vuelta; a los días que se estiran, a las noches que se repiten, a los estudios que no alcanzan para llenar más que exámenes, al laburo que en cualquier momento deja por otro. Molina se busca la vuelta; sabe que no puede llegar a todo y por eso, quiere todo y tiene las manos vacías. Liana recién ahora siente lo que es un hueco, un relleno, y la insaciabilidad. Mino absorbe para llenarse y aunque no se llene, sigue absorbiendo; es como un caño que chupa, aspira, imanta, y adentro tiene viento que se azota en cantidad, en furia, en revuelo. Loli se queda en el medio, atrás de una raya que no cruza porque hay carteles y vías y caminos que no quiere mezclar, por los demás y por ella. Paca está repartida, partes que inventa, y junta y tira. Algunos se suman a la re-estructuración del sentido. Otros, se acomodan a la vanguardia, o a la moda, o al aislamiento, o se van en viajes interminables. No hay tanto que nos iguale en algo así como la juventud, más que edades, a lo mejor equiparables. El resto, es compartido con nenes chiquitos, con pubers, con viejos e incluso a veces, no es compartido entre nosotros, los jóvenes. Que el salto más grande al interior de la militancia política y de la juventud, en los últimos años, se dio del lado del kirchnerismo, es una nota, aunque muy probablemente en el espacio más cercano de cada uno ese dato no tenga la magnitud correlativa. Con la muerte del pingüino pasó algo extraño, y fue que los jóvenes, no kirchneristas, se pararon enfrente del televisor, porque escuchaban algo de ellos, y supieron que a lo mejor, se estaban perdiendo de algo, como decir, algo histórico, algo grande, algo como lo que va a estudiarse dentro de no sé, cien años si perdemos, y veinte años, si ganamos. Que se hable tanto de la juventud como categoría analítica comparable llamativa obvia o lo que sea, instala la consigna y no mucho más, porque están apurados, la mayoría, por decir algo. Lo que empezó a verse es el amanecer de una larga noche de reivindicaciones, el número de los interpelados, y si se quiere, jóvenes movilizados, que como tales, viven abriéndose paso, con ímpetu de ganadores, apenas frenando en tropiezos, jóvenes que encontraron un lugar una posibilidad. jóvenes, que encontraron. Las bases van moldeándose en procesos propios a la vez que tironeados, no es nuevo, y quienes las componen tampoco son nuevos, digo, como grupo social. ahora la necesidad de la organización, que es, además, lo que tantos temen. Estudiar, mañana, este presente, no es dato menor, en un hoy que estudia un ayer de pocos, formalmente. Por eso, lo que se viene, o a donde deberíamos ir, es dato mayor. Más allá de lo referencial, la solidez de un sentido, de un espacio a re-significar, la convicción de verlo, y vernos, re-significados, es el cambio que hace rato abrió la puerta, para sentar cabeza, en procesos tironeados, y también propios.
26 noviembre, 2010
(sin título)
Mito es de pocas palabras, y va diciendo tanto. es, entre miles que son, y entre otras y otros que no son. buscaría en los kioscos capitán del espacio, si supiera lo que es. putearía al viento alejándose, si agustín va con esa unidad impresentable. yo, también. Le busca la vuelta; a los días que se estiran, a las noches que se repiten, a los estudios que no alcanzan para llenar más que exámenes, al laburo que en cualquier momento deja por otro. Molina se busca la vuelta; sabe que no puede llegar a todo y por eso, quiere todo y tiene las manos vacías. Liana recién ahora siente lo que es un hueco, un relleno, y la insaciabilidad. Mino absorbe para llenarse y aunque no se llene, sigue absorbiendo; es como un caño que chupa, aspira, imanta, y adentro tiene viento que se azota en cantidad, en furia, en revuelo. Loli se queda en el medio, atrás de una raya que no cruza porque hay carteles y vías y caminos que no quiere mezclar, por los demás y por ella. Paca está repartida, partes que inventa, y junta y tira. Algunos se suman a la re-estructuración del sentido. Otros, se acomodan a la vanguardia, o a la moda, o al aislamiento, o se van en viajes interminables. No hay tanto que nos iguale en algo así como la juventud, más que edades, a lo mejor equiparables. El resto, es compartido con nenes chiquitos, con pubers, con viejos e incluso a veces, no es compartido entre nosotros, los jóvenes. Que el salto más grande al interior de la militancia política y de la juventud, en los últimos años, se dio del lado del kirchnerismo, es una nota, aunque muy probablemente en el espacio más cercano de cada uno ese dato no tenga la magnitud correlativa. Con la muerte del pingüino pasó algo extraño, y fue que los jóvenes, no kirchneristas, se pararon enfrente del televisor, porque escuchaban algo de ellos, y supieron que a lo mejor, se estaban perdiendo de algo, como decir, algo histórico, algo grande, algo como lo que va a estudiarse dentro de no sé, cien años si perdemos, y veinte años, si ganamos. Que se hable tanto de la juventud como categoría analítica comparable llamativa obvia o lo que sea, instala la consigna y no mucho más, porque están apurados, la mayoría, por decir algo. Lo que empezó a verse es el amanecer de una larga noche de reivindicaciones, el número de los interpelados, y si se quiere, jóvenes movilizados, que como tales, viven abriéndose paso, con ímpetu de ganadores, apenas frenando en tropiezos, jóvenes que encontraron un lugar una posibilidad. jóvenes, que encontraron. Las bases van moldeándose en procesos propios a la vez que tironeados, no es nuevo, y quienes las componen tampoco son nuevos, digo, como grupo social. ahora la necesidad de la organización, que es, además, lo que tantos temen. Estudiar, mañana, este presente, no es dato menor, en un hoy que estudia un ayer de pocos, formalmente. Por eso, lo que se viene, o a donde deberíamos ir, es dato mayor. Más allá de lo referencial, la solidez de un sentido, de un espacio a re-significar, la convicción de verlo, y vernos, re-significados, es el cambio que hace rato abrió la puerta, para sentar cabeza, en procesos tironeados, y también propios.
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1 comentario:
Que existan jóvenes que puedan expresar tan claramente como en esta nota, aún dentro de lo confuso de una mezcla de sentimiento y conciencia sobre lo que está sucediendo, me da la seguridad que este proyecto que inició Néstor no puede fracasar. Muy bueno.
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